Los mexicanos tenemos un sinfín de características que forman parte de toda una cultura pero en muchas ocasiones carecemos del conocimiento acerca de nuestra historia, lo cual provoca una crisis de identidad que puede provocar numerosos desordenes en cuanto a nuestras costumbres y formas de vivir.
Esto puede generar muchos problemas ya que tenemos costumbres erróneas que nos perjudican y por lo tanto, a la sociedad y al país entero. Tenemos un grave problema pero no se ha hecho nada para solucionarlo y puede ser fruto de que a nadie le interesa, nos gusta sufrir, ser manipulados, callar y no quejarse, no defender nuestros derechos y libertades. ¿Vivimos inconscientemente o es que nos gusta vivir así?
Este trabajo pretende consientan a los mexicanos de desechar todo lo malo que reflejamos y conservar lo bueno que tenemos porque la respuesta está en todos, no es cuestión del presidente, o de los profesores solamente, sino se requiere de toda la sociedad en conjunto, comenzando con la familia, que es un agente socializador muy importante, tratando de inculcar buenos hábitos y costumbres a las nuevas generaciones, y, como ya lo mencionamos, acabar con todas esas malas costumbres que no nos permiten desarrollarnos como sociedad.
¿QUÉ ES IDIOSINCRASIA?
Idiosincrasia, que
proviene de un vocablo griego que significa “temperamento particular”, es
un término vinculado al carácter y los rasgos propios de
una persona o de una colectividad.
La idiosincrasia suele contemplar cuestiones que, aunque son distintivas de un
sujeto, son consideradas desde un punto de vista subjetivo. En el caso de la
idiosincrasia de un grupo social, se corre el riesgo de caer en
el estereotipo ya que no todos los sujetos presentan los mismos
rasgos. Se trata de señalar algunas características comunes y compartidas por un
gran número de integrantes de una comunidad.
La idiosincrasia es advertida a partir del comportamiento social de
las personas, sus gustos y desempeño profesional. Se dice, por ejemplo,
que los pueblos latinos suelen ser más cálidos y afectuosos que las comunidades
germanas o sajonas. Esta característica de la idiosincrasia puede ser resaltada
por todos aquellos que han conocido distintas regiones del mundo y están en
condiciones de comparar las relaciones sociales que se establecen en los
distintos países.
Los mexicanos tenemos un sin fin de características que forman toda una
cultura, por un lado el resultado del mestizaje puro entre conquistadores
españoles y conquistados, mezcla no solo de sangre si no de culturas y
creencias. Somos españoles denigrando a indios y somos indios odiando a los
españoles.
La manera de ser del mexicano es vivir en un completo desorden, la preocupación
por el aspecto emocional y el espiritual de la vida se refugia en la
religiosidad, en el apego a las tradiciones.
CRISIS DE IDENTIDAD
México se encuentra en una profunda crisis
de identidad y pérdida de valores. ¿Quiénes somos los Mexicanos? nos
preguntamos muchos de nosotros. Y esta confusión tiene una raíz que se origina
desde la conquista, las invasiones extranjeras, el arrebatamiento de las
tierras del Norte, pero sobre todo del profundo rechazo de la actual imagen del
Mexicano "Tranza, flojo, conformista, y vivo".
Y es que parece ser que los mexicanos hemos perdido la confianza en nosotros
mismos a través de ser testigos como históricamente se le ha traicionado a la
madre patria con sangre y traición entre sus propios hijos.
Es por eso que me llama mucho la atención como la sociedad mexicana esta
tan hambrienta de triunfos que celebra, sin comparación alguna, lasfiestas
patrias. Pero en la realidad usan el modelo del mexicano
"Vivo".
Esta contradicción nos llama mucho la
atención pues vemos en ella un país que quiere, pero no sabe cómo. Y en esa
confusión la vivacidad o supervivencia se convierte en el modelo predilecto
donde el que es más vivo es el que avanza. Pero ¿A dónde avanza? NO AVANZA solo
escala a la cima de un árbol que no crece porque sus raíces han sido
maltratadas.
Por fortuna observamos que una gran parte de mexicanos se empiezan a preguntar
¿Quién es México y a dónde va? y eso refleja el hartazgo y rechazo a la imagen
del mexicano mediocre y "vivo". Porqué México no debe ser nuestra
clase política actual, ni nuestra sociedad desinteresada. México no debe ser
egoísta! México es un país con profundas raíces de culturas milenarias. México
es un país de luz y color, de magia y alegría.
Es por ello que requerimos del despertar de ese letargo de nuestra sociedad.
Ser nuevos mexicanos con valores. Mexicanos que amen a su país y su cultura.
Que se interesen por ser mejores cada día y alienten a cada uno de sus semejantes
a serlo. Y sobre todo que se perdonen a sí mismos.
Es verdaderamente una pena como los mexicanos siguen arrastrando la conquista,
la perdida de California y los territorios del Norte; y las invasiones.
Perdonemonos como país. Recordemos y miremos hacia adelante.
EL
TRABAJADOR MEXICANO
El Trabajo durante la dominación española
* El trabajador no era más que un peón esclavizado y robotizado.
* El poder, el dinero y el prestigio dependían de los nexos con la
Corona española, no del trabajo.
* Los funcionarios de altos niveles eran los primeros en dar malos
ejemplos
* El trabajo era tomado como una servidumbre, no como expresión creativa
de las personas.
* Se estableció el concepto de cargo público como instrumento de
obtención de beneficios, riqueza y patrimonio personal y no como deber público
y servicio a la comunidad.
* Las personas valían por sus privilegios no por sus méritos.
El mexicano no puede tener una actitud
“inocente” o neutral hacia el trabajo. El mexicano trabaja para vivir y no vive
para trabajar.
La dependencia, el individualismo y al autodevaluación, son elementos
presentes en las relaciones laborales. Explican la escasa motivación para el
trabajo en equipo y el excesivo deseo de conquistar poder y estatus a
través del influyentísimo y del recurso económico.
Como ya se mencionó, muchos mexicanos ven al trabajo sólo como un medio para
subsistir; si se busca trabajo, se busca dinero.
En México, existe un número considerable de días no laborales; esto combinado
con un estado anímico poco positivo, crea altos índices de ausentismo, de
impuntualidad, accidentes y enfermedades relacionadas con el trabajo, así como
una alta rotación de empleos, lo cual, lógicamente, no es bueno para la
economía y la productividad de un país.
Además con la actitud resignada, fatalista y el desprecio a sí mismo, se
convierte en desprecio hacia su trabajo y al de los demás.
El mexicano rehúsa asumir el liderazgo por temor a ser rechazado, fracasar o
porque tal vez termine siendo el único trabajando.
¿QUÉ SE PUEDE HACER AL
RESPECTO?
Cada época, marca su manera de vivir,
pensar, evolucionar y esta depende de la idiosincrasia, raíces históricas
y culturales de la región o país que se trate. Es nuestra decisión
esperar sentados a que alguien venga a que nos mejore las cosas o tomar las
riendas de nuestra vida hacia un camino que nos saque de la ignorancia,
mediocridad y pobreza. Por ello, aquí se resumen los ingredientes para que un
mexicano salga de la ignominia se convierta de un perdedor a un ganador o de
víctima de las circunstancias que vive a manejador de su destino.
Hace tiempo, un americano dijo: “entre otras cosas, hay una
abismal diferencia cultural entre nosotros y ustedes, ustedes fueron
conquistados o son el resultado de la mezcla de la conquista y nosotros somos
conquistadores”. Según él, allí fundamentaba la radical diferencia de economías
entre los dos países. También decía “pero nosotros estamos inmersos en el
materialismo, ya perdimos los valores familiares y ustedes todavía los
conservan. Aprendan de nosotros y conserven lo bueno de ustedes”.
Un alto ejecutivo japonés que visitó una de sus plantas
automotrices en México citó a una reunión a los ejecutivos mexicanos y comenzó
diciendo “Señores, quiero decirles que ustedes son los hombres del mañana”, los
mexicanos se sintieron muy orgullosos por tal halago y dijo “¿saben porque?
Porque todo lo dejan para mañana”.
Hace algunos años, en un puerto mexicano que fue muy
próspero y hoy esta muy contaminado ambientalmente y en la extrema pobreza, un
originario del lugar dijo “lo que falta aquí es que vengan inversionistas para
crear empleos y salir de donde estamos” y otra persona que no era originaria de
allí le contestó “no son inversionistas lo primero que aquí se necesita, sino cambiar
la manera de pensar, crear y trabajar, porque esa fue la razón por la que ese
pueblo se acabó en el descuido, el despilfarro, falta de ahorro e inversión”.
Un empleado en México tenía un jefe americano y este le
dijo que tenían reunión a las 10 a.m., el mexicano llegó a las 10:30 a.m. y al
entrar a la sala, de manera amable le dijo “muy bien, mexican time”.
Y así podríamos seguir mencionando infinidad de más
anécdotas. Lo que es claro, es que como sociedad, en general nos enmarcamos en
una manera de SER.
Todo es relativo, cuando llegan corrientes nuevas nacidas
en otros países como justo a tiempo, calidad total, certificación por
competencias, etc.; muchos se lanzan a implementarlas inmediatamente buscando
en ellas la solución inmediata a los problemas que enfrentan. El tiempo también
ha dicho que esas filosofías por muy buenas que sean, no se pueden implementar
tal cual fueron diseñadas, sin antes hacerle las adaptaciones necesarias al
entorno donde se instalarán.
El modelo de desarrollo del individuo coreano, japonés,
taiwanés, americano, europeo, entre otros, no se puede simplemente tomar e
implementar debido a sus matices propios de cada cultura o nación. Por ello se
llamó “… desarrollo del mexicano”. Seguramente individuos en cada país pueden
crear su propia definición de desarrollo, basado en investigación y
conocimiento de su cultura.
Lo más importante, no es la definición de un plan de
desarrollo sino la decisión y puesta en práctica de adquirir esos hábitos.
Hablaremos un poco de hábitos. Se dice que de nuestra
mente, solo el 5% es mente consciente y el restante 95% es mente subconsciente.
Es decir, lo que realmente decimos que controlamos de nosotros es solo un 5%,
el resto de lo que somos, viene de una fijación o programación hecha por hábitos
a nuestro subconsciente. Por lo tanto, mucha de nuestra tarea en la vida es
desechar malos hábitos y cambiarlos por nuevos.
Cuando hacemos algo que no nos gusta, lo postergamos, nos
duele la cabeza, etc.; pero se dice que si tú, conscientemente decides hacer de
eso, hábito tuyo, entonces necesitarías repetirlo al menos 21 veces en un
periodo corto. En ese momento ya no te cuesta trabajo, lo haces de manera
involuntaria, inconsciente. Entonces, quiere decir que con el 5% de nuestro
consciente vamos a manejar o educar a través de buenos hábitos al 95% de
subconsciente. Si esto sucediera, se dice que el consciente y subconsciente se
hacen uno solo y estaríamos manejando el 100% de nuestra vida a nuestro
completo antojo. Muchas enfermedades y sufrimientos desaparecerían. El problema
radica, en que para la mayoría de nosotros no nos damos cuenta que actuamos de
manera subconsciente y por lo tanto perdemos la habilidad de a donde llevar
nuestro subconsciente, pero esto es asunto que no se tratará aquí.
Ya se ha discutido mucho en otros artículos sobre la
relación y secuencia que hay, entre el SER, HACER, TENER. En este caso
nos enfocaremos únicamente al SER.
Mismas acciones conducen a mismos resultados, es decir, es
un círculo vicioso, no hay mejora, no hay crecimiento, no hay desarrollo.
La vida se va desarrollando en incorporación y
mantenimiento de buenos y malos hábitos, está en nosotros decidir cuales
tomamos.
Los 16 hábitos están secuenciados, a manera de evolución
del desarrollo personal. No es el objetivo que te aprendas de memoria los
hábitos, pero se recomienda los escribas y tengas al alcance para verificar que
se sigues su camino.
Al definir los 16 hábitos del desarrollo del mexicano,
basado en nuestra cultura, se pretende definir la adquisición de los mínimos
atributos, buenos hábitos o valores que nos lleven a estados de abundancia de
vida personal y por consecuencia la creación de una nueva sociedad y nación.
Aunque se puede decir mucho de cada hábito, solo se
describirá brevemente su objetivo.
- Disciplina.
Sin
este hábito, no se llega a nada, la vida se corrompe, se quiebra, no hay
consistencia. Toda voluntad que se quiera mover tiene que ser iniciada con
auto disciplina.
- Orden.
Del
exterior que te rodea, de tus pensamientos, de tu arreglo personal,
de tu vida, de tus planes.
- Limpieza.
Puede
estar ordenado pero no limpio, de tu alrededor, de tu persona, de tus
cosas.
- Honestidad.
No
es lo mismo ser bueno que ser honesto. Tampoco no termina al no hurtar
sino a que lo que pienses hagas y dices sea congruente. La verdad te hará
uno solo contigo mismo y será más fácil vivir y conseguir lo que quieras y
a donde vayas.
- Autoestima
/ Valoración. Se refiere a valorarte y quererte por lo que
eres, no por lo que no eres y a saberte y sentirte merecedor de todo en la
vida. Que no seas víctima de las circunstancias; sino iniciador,
manejador, líder de tu vida.
- Respeto.
Primero
de ti para ti, después, respeto hacia ti y luego respetar a los demás
personas, incluyendo animales, vegetales y medio ambiente.
- Responsabilidad.
Habilidad
para responder por uno mismo, es decir no echar culpas a otros por mis
situaciones sino hacer conciencia que yo soy el único responsable de lo
que me pase en mi vida.
- Compromiso.
Aportar,
no solo recibir. Crear compromisos con todo en el mundo que te rodea. A lo
que te comprometas contigo o con otros cumplirlo.
- Desempeño
libre de defectos. En todo lo que hagas, hazlo bien, da lo mejor
de tu ser, disfrutándolo. No te aceptes resultados mediocres, eso denigra
tu existencia y te defraudas a ti mismo. Todo esto. sin caer en la tiranía
del perfeccionismo.
- Prevención.
Tienes
dos opciones: dejar que las circunstancias manejen tus eventos y tiempos y
por lo tanto sentirte esclavizado de la vida o tú manejarlas de manera
anticipada y planeada.
- Educación.
Tú
decides si te mantienes en las tinieblas o ignorancia o incursionas a la
luz del mundo que nos rodea. Entre mejor preparado en conocimiento o
academia estés, serás como un pez en el agua para responder y embestir en
el mundo actual global.
- Mejorar
continuamente. Como el agua estancada que no corre, se pudre
y se corrompe. Así también nosotros, el que no mejora, sigue dando vueltas
en lo que piensa que es su realidad y nunca sale de allí. Se vuelve un ser
paradigmático. Quien no mejora, está muerto en vida. La mejora, es
disfrute abundante de vida.
- Perseverancia
/ Tenacidad. Sueña y haz siempre tus sueños realidad. Si no
funciona, cambia de rumbo una y otra vez pero siempre consigue lo que
quieras.
- Amor
al trabajo. Muchos nacimos con el tabú que el trabajo es
castigo, pena, fatigante y una cárcel. No solo quiere el trabajo sino
ámalo. El trabajo es vivificante, dignifica, da sentido de realización.
Disfruta siempre tu momento presente, haz del trabajo un estado de
creación, de diversión. Sea cual fuere, siempre enfrenta los retos del
trabajo con positivismo. El trabajo nos da la oportunidad de poner en
práctica nuestro SER en el HACER, de seguir disfrutando y
aprendiendo de la vida; y si además de eso nos pagan es ganancia
adicional.
- Ahorro
e Inversión. El rico ahorra, sabe comprar y gastar, por eso
tiene. Es generoso cuando lo quiere. El rico no es esclavo del dinero, mas
bien lo señorea. Tu decides si lo ahorras o lo inviertes pero siempre
genera en ti la sensación de TENGO. Se ha comprobado que no es más rico el
que más gana sino el que más ahorra porque así como lo ganas lo puedes
gastar y puedes seguir en estado miserable así ganes lo que ganes. Muchos
ricos, practican la austeridad como un buen hábito y esto no significa no
disfrutar de la vida o de lo que realmente necesitaras.
- Participación.
A
veces nos metemos en el juego de “dime lo que me toca hacer”. Esta es una
posición muy cómoda de la vida porque te conviertes en conformista
seguidor. Esta frase se pudiera cambiar así: “¿cómo puedo yo ayudar?”. Por
eso se dice que es mejor y da más placer dar que recibir. De hecho, esta
es una de las fases esenciales de nuestro entendimiento en el paso por la
vida. Cuando se llega a este nivel de conciencia, muchos entienden que en
realidad vivimos para trascender a través del amor.
Muchas
veces nos quejamos de nuestras circunstancias pero hacemos NADA por
cambiarlas, esta es una oportunidad para que hagas algo por México,
lo único que tienes que hacer es mandarle a 20 Mexicanos más este
escrito, y si estás de acuerdo, esforzarte por vivirlas y aplicarlas todos los
días.
Si
no lo mandas. NO tendrás maldiciones sobre ti, tampoco tendrás
menos suerte, o te acarrearas un maleficio sobre ti por los próximos
años, NO, simplemente NO PASARA NADA.
Sí,
desgraciadamente NO PASARA NADA. Y seguiremos con el México
actual que tenemos.